Tanto el salón del banquete como la pasarela, que será decorada por dentro con madera y una tela de color roja, están repletos de pantallas planas enormes, empotradas en las paredes. En esas pantallas -hay unas treinta solo en el pasillo- se verán imágenes de los novios. El techo es bajo y sobre los invitados penderán grandes lámparas que llegarán casi a las mesas.
Varias empresas trabajan estos días en el montaje de la boda. De Bélgica han venido unos veinte operarios de Pro First Event Designer, especializados en diseñar grandes espectáculos. Su despliegue en el pazo es de tal magnitud que contactaron con la firma coruñesa Boketé, de cátering, para que les diese de comer en el pazo. Finalmente pensaron que ya había suficiente lío en el interior como para montar otro servicio y optaron por comer de restaurante. La familia Ortega les pagó un almuerzo en un conocido local coruñés.
Ya se sabe también qué vinos serán consumidos en la boda. Los Ortega optaron por un albariño de la denominación de origen Rías Baixas: Pedralonga 2010, de Adega Pedralonga, que dirige Miguel Alonso en O Salnés. Es un caldo de 25 euros por botella en tienda gourmet. Se han adquirido 100 de 75 centilitros y 50 mágnum de un litro y medio. El tinto va a ser el Roda I, Reserva 2006, de Bodegas Roda (Haro, La Rioja). Este caldo tiene un precio aproximado de 40 euros por botella en tiendas de delicatesen.
Los vinos regarán la magnífica merluza de Celeiro que preparará el chef Marcelo Tejedor. Serán piezas de más de cuatro kilos llegadas ayer de madrugada en la última marea, según informa Salvador Serantes. La receta elegida finalmente por el cocinero será con caldo de pimientos verdes y pilpil de limón.
El tráfico de camiones de gran tonelaje ha sido constante esta semana en la pequeña carretera del pazo. Para descargarlos, los Ortega habilitaron un párking, semiescondido a menos de un kilómetro de su finca. Ayer al mediodía había ocho tráileres aparcados. La mercancía se fue trasladando al edificio con camionetas más pequeñas. Uno de ellos dejó el martes las plantas que decorarán el interior de las cartas. Según testigos de la maniobra, mirtos en gran medida.
Los adornos florales del belga Thierry Boutemy decorarán los centros de mesa y las carpas.»
Que bien se lo montan algunos! 😉